En el marco del Aniversario 45 de la Universidad de Cienfuegos, la historia de Gisela Bravo López resuena con especial fuerza y emoción. Su dedicación y compromiso con esta institución no solo representan un testimonio de su crecimiento profesional, sino también de su profundo desarrollo personal.
Para Gisela, ser parte de la Universidad de Cienfuegos durante tantos años ha sido una experiencia profundamente enriquecedora y transformadora. <<Esta institución no solo ha sido el pilar de mi crecimiento profesional, sino también un espacio de desarrollo personal>>, comparte. Aquí ha establecido relaciones que han dejado una huella indestructible en su vida, y su compromiso con la universidad es inquebrantable. <<La Universidad de Cienfuegos ha sido, y seguirá siendo, más que un lugar de formación: es un símbolo de mi identidad profesional y un hogar donde siempre encuentro inspiración y sentido de pertenencia.>>
A lo largo de estos años, Gisela ha vivido momentos de gran orgullo y satisfacción. Cada aniversario de la universidad es una celebración que la llena de alegría, siendo testigo de los éxitos alcanzados. <<La universidad ha sido, además de un lugar de trabajo, un espacio donde mis hijos crecieron, jugaron e hicieron travesuras que aún me sacan una sonrisa,>> recuerda con ternura. También ha formado a muchos estudiantes que hoy son colegas, lo que le llena de satisfacción y orgullo. Sin embargo, la nostalgia la acompaña, especialmente por aquellos que ya no están físicamente, pero cuya presencia siente en silencio, guiándola desde donde se encuentren. <<Sus recuerdos son parte de lo que me impulsa cada día,>> dice con emotividad.
En su labor educativa, Gisela ha orientado su trabajo hacia la formación de profesionales íntegros y comprometidos con la sociedad. Utilizando las potencialidades educativas de los contenidos que explica, ha contribuido significativamente al desarrollo de sus estudiantes. <<Creo en el sistema de valores del docente universitario,>> afirma, destacando la importancia de la laboriosidad, la honestidad y el humanismo en su trabajo diario.
Mirando hacia el futuro, su mayor aspiración es que cada estudiante y profesor sienta el orgullo de pertenecer a una institución que se esfuerza por ser mejor cada día. <<Aspiro a que esta institución crezca en prestigio y excelencia, manteniendo su esencia como “La Casa de Altos Estudios” que es y merece ser reconocida,>> expresa con convicción.
En este aniversario, Gisela quiere expresar su más profundo agradecimiento a todas las personas que han contribuido al crecimiento y desarrollo de la universidad. <<Cada profesor, estudiante, trabajador y directivo ha sido pieza clave en la construcción de esta gran institución,>> dice. << ¡Gracias por ser parte de este legado y por seguir creyendo en el futuro de nuestra Casa de Altos Estudios!>>
Finalmente, su mensaje de felicitación a la Universidad de Cienfuegos en su 45 aniversario es claro y motivador: <<Felicidades, Universidad de Cienfuegos, ¡por estos 45 años de historia y excelencia! Sigamos creciendo juntos, con la misma pasión y compromiso, construyendo un futuro aún más brillante. ¡Que cada aniversario nos encuentre más fuertes, unidos y orgullosos de ser parte de esta gran Casa de Altos Estudios!>>
Elaborado por la Dirección de Comunicación Institucional. UCf.

