Dos desarrolladores de la Universidad de Cienfuegos crean Alic.IA, un asistente legal interactivo y colaborativo, basado en inteligencia artificial.
Durante el primer intercambio de este año del Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, Miguel Díaz–Canel Bermúdez, con expertos y científicos, fue presentada la Estrategia de Desarrollo de la Inteligencia Artificial (IA) en nuestro país y su sistema de trabajo.
En ese encuentro, el mandatario cubano subrayó que la aplicación de la IA puede representar muchísimo para el desarrollo de la Mayor de las Antillas, la cual debe aspirar a estar en la avanzada en este ámbito, al menos en América Latina y el Caribe.
No se dispone aún de toda la infraestructura necesaria, pero sí contamos con un capital humano lo suficientemente preparado para avanzar en ello, consideró en la ocasión el Jefe de Estado.
La doctora en Ciencias Jurídicas Yoruanys Suñez Tejera y el doctor en Ciencias Técnicas Boris Pérez Cañedo constituyen una muestra de lo anterior. Estos dos profesores de la Universidad de Cienfuegos son los desarrolladores de Alic.IA (asistente legal interactivo y colaborativo basado en inteligencia artificial, sin precedentes en Cuba).
Yoruanys, autoridad de la IA vinculada al escenario legal, es abogada de la Organización Nacional de Bufetes Colectivos (onbc), miembro de la Junta Nacional de Juristas, artífice de diplomados internacionales desde la casa de altos estudios local, y coordinadora/directora/coautora de dos volúmenes sobre inteligencia artificial que serán presentados en la Feria Internacional del Libro de La Habana 2025.
Estos textos son Inteligencia artificial y ciberdelito: realidad y retos para las ciencias penales y la criminología, contentivo de materiales escritos por expertos de Rusia, España, Colombia y Cuba; e Innovación y resolución de conflictos: la intersección entre las nuevas tecnologías, la inteligencia artificial y los métodos alternativos, coescrito con Marta Gonzalo Quiroga, profesora titular de Derecho Internacional Privado en la Universidad Rey Juan Carlos, de España.
Boris, miembro joven de la Academia de Ciencias de Cuba, integra el Grupo de Investigación en Modelos de Decisión y Optimización de la Universidad de Granada, España. Los estudios sobre IA de este matemático e informático han aparecido en publicaciones científicas.
SURGIMIENTO Y FUENTES DE ALIC.IA
Según explicó a Granma la doctora Yoruanys, Alic.IA surge ante la necesidad que ella tenía de darle una respuesta a un cúmulo de trabajo, cada vez mayor, en el campo de la abogacía. Cuenta que llegó un momento en el cual se vio saturada (porque, además, cumple múltiples tareas). Así lo expuso a Boris y, entre ambos, pensaron en concebir un instrumento que llegaría a transformar la vida profesional de esta jurista. Hoy día no puedo vivir sin Alic.IA, confiesa.
Este asistente especializado en temas legales (no responde a otros campos del saber) está entrenado para trabajar sobre la base de la consulta de fuentes de la legislación cubana: Constitución de la República de Cuba, Ley de Ejecución Penal, Código Penal, Ley de Procesamiento Penal y más de 70 resoluciones, decretos leyes u otros instrumentos jurídicos
Y también con base en la jurisprudencia (conjunto de sentencias dictadas por el Tribunal Supremo Popular) y la doctrina o teoría: textos editados por la revista de la onbc. En su respuesta, el mecanismo digital incorpora la fuente de la cual obtuvo la opinión que propone.
INTELIGENCIA ARTIFICIAL EN EL JUZGADO
Alici.IA ha sido originalmente diseñado para los abogados, pero en la práctica puede utilizarse por jueces, fiscales, profesores, estudiantes de Derecho, y hasta por cualquier ciudadano común interesado en conocer sobre la jurisprudencia, remarcan los entrevistados.
Por ejemplo –precisa Boris–, la persona le narra brevemente el hecho que le ha ocurrido, y el asistente le explica si califica o no como delito, así como un grupo de características aclaratorias.
«Alic.IA da una respuesta basada en esa pregunta formulada, y le puede decir qué Artículo, de la Constitución, del Código Penal o de la Ley de Proceso Penal pudo haber sido violado, o explica su interrogante. Utiliza veredictos de tribunales, los cuales consulta, y elabora una respuesta contentiva de elementos de la legislación, la jurisprudencia y, además, teóricos», agrega.
A juicio de Yoruanys, resulta muy útil para un abogado porque, entre otras múltiples ventajas, puede utilizarse en pleno juicio para consultas en torno a la defensa del acusado, en escasos segundos.
Posee otra bondad, relativa a la gestión de casos. Las distintas etapas del proceso entrañan la generación de documentación, que el abogado debe presentar a una autoridad actuante. Alic.IA toma información del caso y elabora un documento, basado en una normativa existente para la redacción de esos textos. Luego, el abogado revisa ese escrito, ejecuta las correcciones que entienda, lo imprime y lo entrega a la autoridad actuante.
«Confecciona cerca de 80 textos factibles de emplear en la fase investigativa, intermedia y de juicio oral de un proceso. Eso nos permite agilizar el trabajo, ahorrar tiempo y mejorar la calidad del servicio. Para recién graduados y adjuntos es fundamental, porque contribuye a su formación y aprendizaje», aprecia Yoruanys.
Asimismo, «dispone de la habilidad requerida para evacuar interrogantes sobre un tema determinado, aunque al mismo tiempo le puedes hacer una pregunta a partir de la cual es capaz de vincular lo que está en la jurisprudencia, en la legislación y en la doctrina; o sea, que regala una respuesta fundamentada, con todos los argumentos.
«También realiza análisis de los elementos de tipicidad, brinda precedentes de casos y veredictos con un nivel de exactitud total, establece las diferencias entre delitos, lo cual apoya en el sentido de que, si albergas dudas con un caso, ella te ayuda a resolverlo. Estás en el tribunal, tienes una idea y la consultas», destaca la especialista.
«Alic.IA entiende texto y también audio. Uno de los abogados que la utiliza me dice que es su secretaria, y yo le digo: no, ella sabe mucho más que una secretaria, porque tiene conocimientos en Derecho», habla, ufana, sobre su creación.
En la solicitud de práctica de prueba, le introducen los hechos y le piden su auxilio (la opción se denomina Generar con Alic.IA); entonces el asistente legal basado en inteligencia artificial entrega una propuesta de todas las pruebas, documentales, testificales, periciales que pueden proponerse para ese caso.
«Proporciona ideas que, al menos yo, ni remotamente pensé. Ella tiene un expediente por cada caso mío», dice Yoruanys.
EL FUTURO DE LA «CRIATURA»
Desde septiembre de 2024, Alic.IA es puesta en práctica por varios abogados de Cienfuegos, en una etapa de prueba que no solo satisfizo, sino que superó todas las expectativas.
De acuerdo con sus desarrolladores, luego de tal periodo, su empleo será masivo, en función de los abogados, especialistas del Derecho en general, y estudiantes de la carrera de todo el país.
A la espera de su fase de generalización (algo en lo cual las autoridades competentes deberán ayudar a estos científicos y a la Universidad de Cienfuegos, en tanto entraña cierta infraestructura y financiamiento: hoy día está en un servidor de prueba gratuito), por ahora Alic.IA se encuentra en forma de aplicación en el celular, y además, resulta consultable en la computadora.
De momento, antes de la añorada posibilidad de socializarse a escala mayor, sus desarrolladores crean una versión perfeccionada de Alic.IA en el análisis de casos, de modo que el asistente legal por inteligencia artificial califique los delitos y establezca grados de participación, consumación…, en fin, cuanto hacen los jueces, abogados y fiscales en un juicio.
Ambos gestores están valorando, además, su asistencia en las técnicas de litigación, en el sentido de colaborar en cómo interrogar y contrainterrogar.
La realidad supera a la ficción. Quien aprecie la reciente película española Justicia artificial (Simón Casal, 2024), sobre el tema de la impartición de justicia por estos mecanismos, comprenderá que Yoruanys y Boris se adelantaron a sus guionistas.
Claro, en ese filme de ficción se planteaba un dilema ético, el cual de ningún modo afronta la «criatura» de los científicos cienfuegueros, concebida acorde con los postulados de nuestro sistema legal, y provista de la ética, integralidad y la coherencia que requiere el uso de la IA: premisas por las cuales abogó el Presidente Díaz-Canel en el intercambio con expertos y científicos.
Tomado de Periódico Granma.