“(…) esta tiene que ser una sociedad con tolerancia cero para la violencia contra la mujer. (…) no hay motivo que pueda explicar un acto de violencia contra ellas”
Miguel Díaz – Canel Bermúdez
La Secretaría General de las Naciones Unidas para las Mujeres designó el día 25 de cada mes para actuar a favor de generar conciencia y prevenir la violencia contra mujeres y niñas.
Para las Naciones Unidas, la violencia y la amenaza de violencia contra las mujeres es la más extendida violación de derechos humanos, socava el desarrollo de los países, genera inestabilidad en las sociedades e impide el progreso hacia la justicia y la paz. La violencia contra las mujeres y las niñas tiene consecuencias físicas, sexuales, psicológicas e incluso mortales para las mujeres. A pesar de los esfuerzos para atender la violencia contra las mujeres, aún queda un largo camino por recorrer.
La Federación de Mujeres Cubanas a través de la campaña “Por una vida sin violencia”, que incluye que los días 25 de cada mes se considere en Cuba, el Día por una vida libre de violencia contra la mujer, ha considerado el desarrollo de actividades, entre las que se encuentran, capacitaciones, acciones de comunicación, desarrollo de investigaciones, entre otras.
El color naranja se ha convertido en un símbolo poderoso en la lucha contra la violencia hacia las mujeres. Fue elegido como un llamado a la acción y una forma de generar conciencia sobre este importante tema. El naranja es un color llamativo y fácil de reconocer. Al usarlo en eventos, campañas y actividades relacionadas con la lucha contra la violencia de género, se logra una mayor visibilidad y se atrae la atención del público. Esto ayuda a difundir el mensaje y a involucrar a más personas en la causa.
Este color tiene connotaciones positivas, como la energía, la valentía y la creatividad. Al asociarlo con la lucha contra la violencia hacia las mujeres, se enfatiza la necesidad de actuar con determinación y coraje para cambiar las actitudes y comportamientos perjudiciales. Su uso particular para celebrar esta fecha crea un sentido de solidaridad y unidad entre las personas que se oponen a la violencia de género. Cuando vemos a otros vistiendo naranja o usando símbolos naranjas, nos sentimos parte de un movimiento más grande y nos inspira a tomar medidas.
En resumen, el color naranja representa la esperanza, la acción y la determinación en la lucha contra la violencia hacia las mujeres. Es un recordatorio constante de que todos debemos trabajar juntos para crear un mundo más seguro y justo para todas las personas, sin importar su género.
Dirección de Comunicación Institucional, UCf.