En el corazón de Cienfuegos, una ciudad que respira historia y cultura, se erige una fuente de conocimiento y transformación: nuestra querida Universidad de Cienfuegos. Este mes, celebramos con orgullo su Aniversario 45, un camino recorrido por miles de estudiantes, docentes y trabajadores que han dejado huella en cada rincón de esta casa de altos estudios. Entre ellos, Vilma Eugenia González Morales se destaca como un testimonio viviente de lo que significa ser parte de esta comunidad.
Para Vilma, la Universidad de Cienfuegos es más que un lugar de trabajo; es una extensión de su hogar y su familia. Desde los tiempos en que era el Instituto Superior Técnico de Cienfuegos hasta su transformación en la Universidad de Cienfuegos, este espacio ha sido el escenario de su crecimiento personal y profesional. <<Es como hablar de una extensión de mi hogar, de mi familia,>>. Aquí estudió la Licenciatura en Contabilidad y Finanzas, y aquí ha dejado una huella imborrable en la vida de sus estudiantes.
A lo largo de estos 45 años, Vilma ha sido testigo y protagonista de momentos que han marcado su vida. Dirigir la organización más antigua y a la vez más joven de Cuba fue un reto que enfrentó con valentía y dedicación. Su trayectoria incluye responsabilidades políticas y académicas, así como misiones oficiales en países como Angola, México, Venezuela y Ecuador. Sin embargo, lo que más atesora son las experiencias compartidas con sus estudiantes. <<La docencia diaria, el vínculo con mis estudiantes, es una experiencia inigualable>>, palabras que denotan la pasión por formar no solo profesionales competentes, sino seres humanos íntegros.
Los valores que Vilma considera fundamentales en la labor educativa son pilares que ha transmitido a sus alumnos: honestidad, ética, responsabilidad y patriotismo. <<No es ser solamente buenos profesionales, sino también seres humanos de bien>>, enfatiza, recordándonos que la educación va más allá de los libros y las aulas; se trata de cultivar el alma.
Con ánimo esperanzador, Vilma comparte su mayor sueño para la UCf: <<Ver una universidad que sigue creciendo, que sigue inspirando>>. Un deseo que resuena con fuerza en cada rincón del campus, donde la ciencia y la innovación son el motor que impulsa a las nuevas generaciones a soñar en grande.
En este aniversario, Vilma no olvida a aquellos que han contribuido al crecimiento de la universidad. Desde su primer rector, el Dr. C. Eduardo Cruz González, hasta cada docente y trabajador que ha dejado su huella en el camino. <<Cada uno desde su posición aportó a la Universidad>>, reconoce con gratitud, recordando a quienes han sido faros en su propia formación. A todos los fundadores entre ellos Martha Rosa López Toledo y Heriberto Alfredo Cabrera Caballero quienes tuvieron mucho que ver en su formación; <<Coralia Pérez Maya, Miriam Iglesias, (me llevaba de la mano y corriendo con la Didáctica y a la cual le agradezco muchísimo)>>. Recuerda además a Miriam Alpizar, Lourdes Pomares, Francisco A. Becerra Lois, Víctor Millo Carmenate, María del Carmen Cedeño, Gladys Elena Capote León, cada uno. desde su posición, aportó lo mejor que sabe haacer para que hoy en sus 45 años, la UCf sea la universidad que se soñó en 1979 para Cienfuegos.
Finalmente, su mensaje para la UCf en este Aniversario 45 es claro y lleno de esperanza: <<Muchas felicidades y que siga siendo un lugar donde se continúe inspirando innovación y progreso>>. Un deseo que no solo celebra el pasado, sino que abraza el futuro con los brazos abiertos.
Así, la Universidad de Cienfuegos se erige como un símbolo de crecimiento y transformación. Con historias como la de Vilma Eugenia González Morales, recordamos que cada paso dado es un ladrillo en la construcción de un futuro lleno de posibilidades. La UCf no solo celebra un número; celebra la vida, el aprendizaje y el compromiso con una sociedad mejor. ¡Felicidades a todos los protagonistas de esta hermosa historia!
Elaborado por la Dirección de Comunicación Institucional. UCf.