La pertinencia local de las universidades cubanas se fortalece en la articulación ciencia-gobierno durante el enfrentamiento a la Covid-19. Las casas de altos estudios se implican en la solución científica de múltiples tareas, como el apoyo al sistema de Salud, a diversos sectores de la economía y el trabajo social en las comunidades; de este último se ejemplifica a continuación.
Este proceso se ha organizado vinculado al perfil profesional de cada carrera. Ivis María Capote Pérez, estudiante de Contabilidad de cuarto año de la Universidad de Cienfuegos, mostró capacidades y responsabilidad en la recopilación, organización e interpretación de la información. Ella se destacó como líder de su comunidad y reveló una sólida formación ética.
Desde abril hasta julio del 2020, una de las brigadas Jóvenes por la Vida de estudiantes de cuarto y quinto años de diferentes carreras de la Universidad de Cienfuegos «Carlos Rafael Rodríguez» (UCf) y la Universidad Central de Las Villas, realizaron en el consejo popular Juanita 2 un diagnóstico comunitario para identificar las personas con mayor vulnerabilidad
En octubre volvió la UCf con estudiantes y profesores de la facultad Educación y la tarea de encuestar a los miembros de la Asociación de Limitados Físico-Motores. Se identificaron, además, niños y adolescentes discapacitados en las escuelas, y se logró efectiva comunicación y orientaciones a sus familias.
En la actualidad la intervención la protagonizan estudiantes y profesores de primer año. En cada consultorio un pequeño grupo atiende a la población más vulnerable para conocer su estado de salud, brindar afectos y ayudar en lo que haga falta. La tarea va más allá del saludo diario, llevar alimentos y medicinas. Si se habla de agradecimiento y confianza, los adultos mayores se ganan la medalla; resulta imposible no comprometerse con ellos y el afecto mutuo va creciendo.
Con la acertada compañía y dirección ejemplar de Lázara Rosalía Burke Cordero, presidente del consejo popular Juanita 2, se logra cumplir la diversidad de tareas, como acudir a las farmacias y entregar los medicamentos a la población vulnerable de los siete consultorios. Se indagan opiniones respecto al Sistema de Atención a la Familia en busca de mejorar su calidad y el apoyo a la granja urbana de la localidad por los agrónomos y veterinarios.
Tres son las claves para que el trabajo comunitario permanezca en la formación de profesionales comprometidos con el proceso social cubano: sistematicidad, organización e intersectorialidad.
Jóvenes por la Vida es un ejército de amor en tiempos de aislamiento social.
Por: MSc. Elizabeth Gradaille Ramas